Latido del corazón del bebé, todo lo que debes saber y más

Cuando se escucha por primera vez el latido del corazón del bebé genera una emoción y sensaciones muy similares en todos los padres. Por ello, en esta ocasión, repasaremos algunos detalles importantes que se deben tener en cuenta respecto a cómo late el corazón de tu bebé y sus aspectos.

Latido del corazón del bebé

¿Cuándo puede escucharse el latido del corazón del bebé?

El proceso de formación del corazón de un bebé comienza a realizarse aproximadamente desde la semana número cinco del embarazo. En este momento, el feto tiene un abultamiento en su centro. Esto se terminará convirtiendo en el órgano bombeador de sangre, en conjunto con los primeros vasos sanguíneos. Igualmente, estos tejidos formarán el aparato cardiovascular restante.

Ya llegados a la semana seis, el corazón empieza a realizar sus primeros latidos regulares. Sin embargo, en muchas ocasiones, los ultrasonidos no detectan esos latidos aún. Hay que tener en cuenta el tamaño del embrión, que apenas es de un centímetro, aproximadamente.

No obstante, durante la ecografía, es normal que se puedan ver los valores del latido del pequeño en formación, expuestos en el monitor. Lee aquí para responder a tu pregunta de «¿cuándo nacerá mi bebé?«.

Ya a partir de la semana nueve o diez del embarazo, el latido del corazón debería ser fácilmente perceptible al oído por medio de las herramientas de la ecografía. Esta ecografía capaz de amplificar los sonidos se denomina “ecografía doppler”, haciendo audible el latido del embrión que, por cierto, será muy rápido.

Con esta ecografía se puede detectar la existencia de problemas cardíacos, si fuese el caso, ya que permite observar el flujo sanguíneo.

Como padres, el sonido del latido nos puede parecer extraño, acelerado y sin mucho que interpretar más allá de eso. Sin embargo, el oído entrenado del médico podrá descifrar si se trata del latido de un bebé o más de uno.

Este veredicto por parte del médico en ocasiones no es tan sencillo, puesto que en los casos de embarazos múltiples existen varios escenarios: Si los bebés están en posiciones diferentes o lo suficientemente distantes, podrá escuchar varios latidos.

Ahora, si por alguna razón, se escuchan dos latidos a la vez, no necesariamente signifique la existencia de dos embriones, pues el latido del corazón fetal puede oírse “duplicado” a veces, por medio del ultrasonido.

¿Qué ocurre si en la semana 12 aún no se escucha el latido del corazón del bebé?

Como se explicó ya, el corazón debería poder escucharse entre la semana 9 y 10. Por eso, en la semana 12 ya debería ser un latido definido. Pero… Hay que tomar las cosas con calma, ya que pueden suceder varias situaciones. Por ejemplo, una posición particular del bebé durante el eco que dificulte escucharlo, o que la madre tenga una capa muy gruesa de grasa materna.

Por otra parte, de no escucharse el latido, también está la probabilidad de que no estemos en la fecha calculada. Es decir, que no se haya acertado al momento de determinar el inicio de la gestación, por lo que podríamos estar realmente en una fecha menos avanzada de la que creemos.

Para descartar esta posibilidad, se puede medir al feto por medio de alguna ecografía. Así, nos basaríamos en su tamaño para calcular con mayor facilidad la edad de gestación. De cualquier forma, es importante no angustiarse, ya que en una o dos ecografías más es casi seguro que se pueda presenciar ese momento maravilloso en que escucharemos por primera vez el latido del corazón del bebé.

Con lo que sí debemos estar muy atentos desde que el corazón se desarrolla, es que los monitores muestren los latidos del bebé en su frecuencia estimada y que la formación del embrión no tenga ningún inconveniente.

¡Un corazón más fuerte!

Ya pisando las semanas dieciocho y veinte, la criatura estará más formada, tendrá mayor tamaño y con unos órganos más fuertes. El latido del corazón del bebé será más vigoroso y, en consecuencia, más audible. Incluso, se podrá escuchar poniendo un estetoscopio sobre el vientre de la madre.

Será fácil diferenciarlo del latido del corazón materno porque su velocidad acelerada seguirá siendo una de sus características (puede variar de 120 a 160 latidos por minuto).

Desde estas fechas (hasta que se dé a luz), los padres que lo deseen, pueden intentar pegar el oído al abdomen de su pareja, a ver si consiguen escuchar el latido de su hijo. Es importante tener presente que no es una tarea fácil y que, dependiendo del caso, es probable que no puedan escucharlo durante todo el embarazo.

Latido del corazón del bebé

¿Por qué no se escucha el latido del bebé pegando el oído a la barriga?

En la antigüedad se realizaban estas prácticas con frecuencia, aunque nunca había seguridad de que hubiese un bebé o no, a no ser que fuese evidente por la barriga.

¿Por qué resulta difícil escuchar el latido del corazón del bebé de esta forma? En el interior de la madre hay muchos elementos que generan sonidos y pueden obstruir el sonido del latido del bebé en formación, o mitigarlo. Algunos de estos sonidos son el sonido del corazón de la propia madre, su flujo sanguíneo, los fluidos de la placenta, entre otros.

Aparte, se debe coincidir con la posición correcta del bebé, ya que la oreja debe estar en la barriga, preferiblemente, cuando la espalda del bebé esté en su dirección, es decir, haciendo contacto casi directo entre la oreja del padre y la espalda del hijo. Lograr esto requiere de gran coincidencia, aparte de mucha práctica y muy probablemente muchos intentos fallidos.

En la actualidad esta tarea se ha hecho mucho más fácil, gracias a la tecnología que trajo consigo a los “dopplers caseros”, que también son conocidos como “detectores fetales portátiles”.

Estos aparatos son dispositivos móviles que se conectan a unos audífonos, permitiendo escuchar el latido del corazón del bebé cuando el detector se desliza por la zona adecuada.

Así mismo, ya hay aplicaciones para teléfonos móviles que hacen más sencilla su detección, visualizando algunos datos como la frecuencia cardíaca. Sin embargo, no son totalmente efectivos, por lo que dedicar tanto tiempo a ello puede no ser fructífero, así que no se recomienda. Aquí puedes ver más información sobre la embarazada primeriza.

Latido del corazón del bebé

Ya nació el bebé… ¿Hay cambios en los latidos y ritmo de su corazón?

Una vez fuera del vientre de su madre, el bebé continúa mostrando un ritmo cardíaco bastante más acelerado que el de una persona adulta. Con el bebé palpable, sin la grasa materna de por medio, se puede notar fácilmente al colocar suavemente la mano sobre su pecho.

Esto es consecuencia de su estado de gestación previo, en donde tenía una circulación diferente y la sangre apenas pasaba por los pulmones (donde se oxigena normalmente) para terminar oxigenándose en la placenta.

Ahora que está en el exterior y no cuenta con esta última, la placenta, las arterias pulmonares comienzan un proceso de adaptación en donde se abren e inician el intercambio de gases en los pulmones.

Este proceso es uno de los principales cambios que sufrirá el bebé en su circulación y es automático. Si sucediese algún problema durante esta adaptación, sería producto de un defecto cardíaco, aunque esto se detecta mediante el test de Apgar.

Este test consiste en una prueba rápida que se ejecuta al primer y quinto minuto del nacimiento del bebé. El resultado del primer minuto muestra qué tan bien reaccionó la criatura al parto. Por otro lado, el minuto 5 sirve para visualizar si la evolución del bebé fuera del vientre es óptima.

La frecuencia cardíaca de una persona adulta es de 60 a 80 minutos (lpm), mientras que lo normal para los bebes recién nacidos es el doble, de 120 a 160 lpm. Cuando el bebé cumple un mes de nacido, el ritmo es diferente y suele ir de 100 a 150 lpm.

Con dos años de edad, ya debería ser de 85 a 125 lpm. A los cuatro años empieza a entrar en el rango de un adulto, siendo de 75 a 115 lpm, y dos años más tarde, a los seis, se reduce un poco más, mostrando un rango de 60 a 100 lpm.

La circulación y oxigenación de la sangre no son los únicos cambios que se producen en un bebé, sino también las células del corazón per se. Éstas son de un tamaño más pequeño y no están organizadas como las de un adulto promedio, por lo que debe esforzarse un poco más.

Latido del corazón del bebé

Es decir, el ritmo acelerado en los niños es debido a que aún es un corazón inmaduro, biológicamente hablando. Por eso, los latidos deben ser frecuentes para que el oxígeno llegue a todos los tejidos y el organismo funcione a la perfección.

Finalmente, sabemos que por medio de la tecnología doppler, el latido del corazón del bebé suele escucharse a partir de la semana diez de embarazo. Diez semanas más tarde, estos latidos son más fuertes y pueden escucharse utilizando un estetoscopio.

Una vez haya llegado el bebé al regazo de sus padres, sus latidos seguirán acelerados e irán ralentizándose con el tiempo, en lapsos aproximados de cada dos años. Te sugerimos también leer nuestro artículo sobre el parto.

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