La hormiga y la paloma es una fábula con la que podrás dejarles una hermosa enseñanza a tus niños. Con ella puedes transmitir valores como la gratitud, el respeto, la amistad y la solidaridad. Aquí te dejamos esta interesante fábula, para que compartas con los más pequeños un momento agradable.
¿Cuál es la fábula de la hormiga y la paloma?
La fábula de la paloma y la hormiga es un relato muy popular para enseñar los valores de compañerismo y solidaridad. Como cualquier fábula, tiene su moraleja y los protagonistas son un par de animalitos.
Las fábulas son muy buenas para transmitir diversas enseñanzas a los niños. Lo mejor es que, al tratarse de animales humanizados, a los chicos les resulta más llamativo. Hay fábulas que enseñan un valor en específico. También hay otras que guardan entre sus enseñanzas un aprendizaje más general.
Fíjate en esta fábula de la hormiga y la paloma y compártela con tus hijos. Luego, puedes hacer un rato de reflexión con ellos sobre lo que comprendieron del relato. Acá también te ofrecemos esta famosa e interesante fábula titulada Pedro y el Lobo.
Fábula de la hormiga y la paloma
Era un día muy caluroso, en el que cierta hormiga necesitaba llegar a su casa. Pero el calor y la sed era tal, que la pobre hormiga no sabía cuánto más podría aguantar antes de llegar a su destino.
En su camino, encontró un arroyo. La hormiga intentó no acercarse más de lo necesario, pero la corriente la atrapó y entonces estuvo muy cerca de la muerte por ahogo. Por suerte, pasó una paloma volando por el lugar y vio lo que sucedía en el arroyo.
El ave tomó una ramita que encontró y se la acercó a la hormiga, para que pudiera sujetarse y salir del agua. De esta manera, la paloma ayudó a salvar la vida de la hormiga. Ante semejante acto de bondad, la hormiga estaba muy conmovida. Le dio las gracias a la paloma y le prometió que algún día le devolvería el favor.
Como era de esperarse, la hormiga se preguntaba a sí misma cómo podría ayudar a la paloma. Pensaba con frecuencia que ella, siendo tan pequeñita, no podría hacer algo importante por la paloma, que era un ave de gran tamaño.
Sin embargo, pocos días después, apareció un cazador de aves. Este hombre divisó a la paloma y ya la tenía en la mira, sin que el ave se diera cuenta. Pero la hormiga, que también pasaba por allí, sí se percató del peligro que corría su amiga alada y decidió intervenir.
Rápidamente, la hormiga se montó en la pierna del cazador y lo picó con fuerza. El hombre dio un fuerte grito y soltó el arma, por lo que la paloma pudo ver el peligro que estaba corriendo. Al retomar su vuelo, se alejó, mientras escuchaba al cazador quejándose porque lo había picado una hormiga.
De esta manera, la hormiga y la paloma salvaron sus vidas con la ayuda mutua, formando una sólida amistad.
Comprensión de la fábula de la hormiga y la paloma
Luego de leer esta fábula, puedes hacer una breve reflexión. Intenta preguntarles a tus niños lo siguiente:
- ¿Crees que la hormiga de verdad necesitaba la ayuda de la paloma?
- ¿Por qué crees que la paloma ayudó a la hormiga?
- ¿La hormiga supo siempre lo que debía hacer para ayudar a la paloma?
- ¿Qué habrías hecho tú para ayudar a la paloma?
Estas preguntas, que pueden variar según tu preferencia o las respuestas de los chicos, son de gran utilidad para comprobar la comprensión de la fábula. Puedes crear un momento de discusión sana sobre los valores que se tratan en el relato y su importancia.
¿Cuáles son los valores de esta fábula?
En esta fábula, puedes observar que hay más de una enseñanza en valores. Los personajes se comportan de una manera muy amable, agradecida y respetuosa entre sí. Ahora veamos qué valores son éstos:
Gratitud: es un sentimiento que se tiene por alguien cuando ésta persona te ha hecho un favor. También se siente cuando la otra persona o grupo de ellas, te ha ayudado en determinado momento. La gratitud suele generar la necesidad de corresponder el favor o beneficio recibido.
Amistad: este valor hace referencia a la relación entre dos o más personas, en las que está presente el amor y el respeto. También implica valores como la confianza, la tolerancia, la lealtad y la solidaridad.
Respeto: indica una consideración hacia otra persona, acompañada de un sentimiento de sumisión, por considerar que la otra persona es digna de ello. Este valor también implica tolerancia y el deseo de no ofender al otro. Te invitamos a leer también la fábula de la lechera.
Compañerismo: es una actitud que suele ir con la amistad y que involucra a las personas que se respetan y acompañan de forma mutua. Esto es para lograr un objetivo común o que los beneficie a todos. Conlleva también un trato armonioso y solidario.
¿Qué se puede aprender de las hormigas?
Así como se observó en el relato de la hormiga y la paloma, los animales, por pequeños que sean, tienen comportamientos que nos enseñan. En el caso de las hormigas, su forma de organizarse y comportarse ha sido motivo de estudio para los humanos desde hace mucho tiempo.
En un hormiguero, cada hormiguita tiene su función ya establecida. Las hay obreras, otras son soldados, tienen una hormiga reina y unas hormigas macho que se encargan de la reproducción con la reina.
Estos insectos también trabajan en equipo, buscando el bien de la colonia de hormigas. No necesitan que alguna otra hormiga las supervise o vigile su trabajo, porque saben auto organizarse.
Por último, debes saber que así como las hormigas, hay otros animales que nos enseñan con su ejemplo. Tanto para actuar como ellos, como para evitar repetir sus comportamientos inadecuados. A continuación te presentamos una serie de cuentos y fábulas que te pueden servir para complementar esta lectura. Mira esta fábula del cuervo y el zorro.