Una vez que se es madre, las mujeres suelen pensar que con el parto terminaron los problemas y las dolencias pero no es así, aún siguen y es que a la hora de amamantar al bebé para muchas resulta ser doloroso, debido a diversos factores, es por ello que muchos especialistas en medicina recomiendan las pezoneras para hacer de este trabajo una experiencia más suave y sin dolor.
¿Qué es una pezonera?
Se trata de un accesorio de silicona que se coloca sobre el pezón de la madre para disminuir el dolor de la succión del bebé, proporcionando una mayor superficie de agarre al bebé y convirtiendo el pecho materno en una especie de biberón. Este accesorio se acopla perfectamente al seno materno y hace que la lactancia sea más sencilla y menos dolorosa en los casos de pezón invertido, desprendimiento, irritación u otros.
Cuando una madre comienza a alimentar a su bebé amamantando, en ocasiones surgen problemas que llevan a las madres a usar pezoneras, estas decisiones suelen venir acompañadas de recomendaciones de asesores expertos en la lactancia materna, que analizan si verdaderamente las madres necesitan de esta.
No todas la madres llegan a usar pezoneras, algunas con problemas para amamantar a su bebé las necesitan para aliviar el malestar que alimentar al niño les causa y otras no.
Las pezoneras han existido desde hace muchos años, aunque en la antigüedad eran fabricadas en materiales más rígidos como el cristal, plata o marfil.
Alrededor de los años 80, se crearon nuevos modelos, fabricados en materiales como el látex y el caucho, pero aun así eran rígidas, resultando muy molestas para las madres e impidiendo poder amamantar al bebé.
Con el pasar de los años, las empresas se dedicaron a estudiar las pezoneras, para idear una que fuera mucho más cómoda tanto para la madre como para él bebe. Actualmente, las han perfeccionaron tanto que se fabrican de siliconas, son mucho más cómodas, más blandas y diseñadas para ser más fáciles de colocar. Se adhieren a la piel con más suavidad y hacen más fácil el agarre del bebé a la hora de alimentarse.
El uso de la pezonera debe ser el adecuado, al igual que su postura, esto no debería de afectar la producción de leche ni la forma de succionar del bebé a la hora de comer.
Muchos profesionales en la salud, están de acuerdo en que la pezonera es un componente muy útil y necesario para el momento de ser madres primerizas y tener que amamantar a él bebe, pero nunca está de más que el uso del mismo sea de recomendación médica o de un asesor de lactancia materna.
¿Cómo saber si puedes utilizar la pezonera?
En muchas ocasiones las madres presentan problemas a la hora de amamantar a sus hijos, los más recomendable es hablar con los asesores de lactancia materna o también con los pediatras que tienen el debido conocimiento para recomendar e indicar estrategias a la hora de usar la pezonera.
Estas son recomendadas en varias ocasiones para facilitar el agarre del bebé al pezón y para aliviar las molestias causadas a la madre. Las recomendaciones de la especialista en asesoría de la lactancia materna Alba Prado son muy nombradas en muchos países, las madres las toman en cuenta y muchas veces las llevan a la práctica.
Sin embargo, como se mencionó anteriormente, siempre hay que tener la opinión del especialista para saber si es posible que utilices la pezonera. A continuación se mencionan algunas de las situaciones más comunes que ameritan el uso de la pezonera.
Situaciones en las que es necesario el uso de pezoneras
Una de las situaciones más comunes para el uso de pezoneras es cuando el bebé tiene dificultad para aprender amamantar o la madre no logra hacer que el bebé se prenda del pezón y succione con normalidad. La pezonera facilita el agarre y la succión del bebé, ayudando a la madre con este proceso.
Muchas veces cuando él bebe es prematuro le cuesta mucho el agarre del pezón o no tiene la suficiente fuerza para succionar la leche, acá es donde el pediatra recomienda el uso de la pezonera hasta que él bebé tenga la suficiente fuerza para prenderse al pezón y coma por sí solo. Otro caso puede ser cuando el bebé tiene el frenillo de la boca corto lo que ocasiona que le cueste el agarre al pezón.
Cuando al bebé le gusta más la fórmula láctea que la leche materna empieza a rechazar la lactancia, en este caso se recomienda el uso de la pezonera para simular la tetina del biberón y procurar que el bebé acepte de nuevo la leche materna.
En muchas ocasiones, cuando las madres son primerizas, el pezón es plano o invertido y él bebe no tiene manera de prenderse para alimentarse, por lo que el especialista usualmente recomienda la pezonera para que ayude al bebé a prenderse mejor y a la madrea aliviar el dolor que le causa amamantar de esta forma.
Cuando la madre sufre de mastitis o se le agrietan los senos, los expertos primero evalúan la causa de las grietas y en última instancia hacen la recomendación de la pezonera, ya que aunque está no evita las grietas, ayuda con la alimentación del bebé y disminuye el dolor hasta que sanen las laceraciones.
¿Cómo se colocan las pezoneras?
Lo primero que se debe realizar es esterilizar las pezoneras antes de usarlas para luego limpiar la zona donde se va adherir, en este caso la areola y el pezón. Se debe tener precaución y verificar que estas sellen bien a la hora de colocarlas para evitar que el bebé la desprenda y pueda ahogarse o incomodarse a la hora de succionar la leche.
Lo ideal es presionar la parte donde irá el pezón para hace vacío e insertar el pezón, luego tirar de las alas y empujar hacia el seno la pezonera para incrementar el agarre. Si está bien colocada podrás ver tu pezón completamente acoplado a la pezonera y estará lista para usarse.
Una vez que se colocan ambas pezoneras, el bebé se alimentará con normalidad. Se debe tomar en cuenta que el contacto de la boca del bebé con la madre es natural, a pesar de que está de por medio la pezonera, se siente como que si no existiera. Quizá quieras aprender más sobre masajes para bebés estreñidos.
Si el bebé realiza un buen agarre a la pezonera, estarás segura de que la lactancia se está llevando a cabo de excelente manera, pero si el bebé sólo agarra la punta, tomará poca leche y aire, no estará trabajando como debe ser la pezonera y esto le generará gases al bebé.
Consejos a la hora de comprarlas
Hay una gran variedad de pezoneras, modelos y tamaños, a la hora de escoger las pezoneras hay que tener en cuentas los siguientes aspectos:
- El tamaño debe ser el adecuado, recuerda que todas las pezoneras no tiene el mismo tamaño, es por ello que se recomienda que busques aquellas marcas comerciales que tienen diferentes tamaños y modelos para que puedas escoger la ideal o la que mejor se adapte a ti.
Debes tomar en cuenta que si es muy grande o muy pequeña le causara molestias tanto al bebé como a la madre, debe tener un tamaño perfecto.
- El material de la pezonera debe ser el mejor, el comité internacional de lactancia exige que las pezoneras sean del material más fino que exista para que así la interferencia entre la boca del bebé y el pezón de la madre sea la mínima.
Ellos recomienda que, aunque el material sea de muy buena calidad y duradero, es recomendable cambiarlas cada cierto tiempo para evitar un deterioro pronunciado.
- La higiene de la pezonera debe realizarse cada vez que se vaya a utilizar, por lo que deben esterilizarse diariamente, lavarlas con agua tibia y jabón neutro sin olores y asegurarse que no quede ningún resto de leche en la misma.
Guardarlas muy bien en un sitio fresco y con su debida tapa para evitar que se ensucien o contaminen.
¿Es recomendable usar las pezoneras durante toda la lactancia?
El uso de estas pezoneras de silicon puede llegar a ser un tanto incómodo para la madre, ya que debe tener por los menos tres juegos para siempre tenerlas a la mano cuando las necesite, llevarlas a la hora de salir, lavarlas bien después de usarlas, entre otras.
Es por ello, que los expertos aconsejan usarlas solo el tiempo que sea necesario, retirándolas por pequeños intervalos mientras el bebé esté comiendo tranquilo. Se debe realizar este paso varias veces hasta que el niño no sienta la ausencia de la pezonera , ni a la madre le ocasione molestia alguna al dejar de usarlas.
Lo máximo que se pueden usar, es por algunos meses, hasta que el bebé tenga cuatro o cinco meses de edad, para que así no se acostumbre y, como se mencionó anteriormente, irlas retirando poco a poco en caso de que cause alguna incomodidad al niño.
En el caso contrario, que tanto la madre como él bebe no presenten ningún problema con las mismas y sean beneficiosas, pueden usarse durante todo el periodo de lactancia materna. También te recomendamos leer más sobre manos frías en bebés para que estés preparada al momento de tener a tu bebé.
La lactancia materna es una experiencia muy especial y única para la madre y para el bebé, es por ello que las madres disfrutan mucho el darles de comer a sus bebé de su pecho. En tal sentido, se recomienda asistir a charlas sobre la importancia de la lactancia materna y grupos de madres prolactancia para apoyarse y aprender de otras madres.
¿Cómo aumentar la producción leche materna?
Algunas madres producen poca leche y aun teniendo la ayuda de la pezonera se hace un poco difícil amamantar al bebé, acá se mencionan varias opciones para estimular la producción de la leche en la madre.
- Tomar abundante agua.
- Beber leche líquida, avena, chicha, chocolate u otras bebidas que contengan leche.
- Estimular el seno para que aumente la leche.
- Tomar té a base de plantas naturales.
- Llevar una buena y sana alimentación.
- Descansar y relajarse.
Otra recomendación es evitar consumir alimentos muy procesados o que puedan generar gases como el brócoli, la papa, las gaseosas, el melón y el repollo, en cambio preferir opciones más saludables y que contengan abundantes líquidos para favorecer la lactancia materna.