La varicela en bebés es una enfermedad muy peligrosa para ellos, debido a que la zona principal afectada del cuerpo es la piel, con rosetones rojos, comezón y ronchas. Generalmente, los padres tienden a confundir la varicela con una erupción cutánea, es por ello que los padres deben prestar más atención de las enfermedades que pueden afectar a sus pequeños.
Varicela en bebés
La directora de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria, Belén Aguirrezabalaga, explica que al principio de esta enfermedad suele aparecer un pequeño sarpullido de color rojo, por distintas partes del cuerpo.
Y mientras transcurren los días, el sarpullido se va haciendo cada vez más grande, hasta formar ampollas en la piel (las cuales poseen un líquido incoloro por dentro) y al final se convierten en ronchas.
La varicela en bebés también presenta otros malestares tales como fatiga y altos niveles de temperatura, además del sarpullido en la piel.
Debido a que la varicela es una enfermedad de fácil contagio e incluso se dice que el 100% de los tratos y afectos que realizan con personas que padezcan de varicela, ocasiona la propagación de la misma.
La directora de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria explica la importancia sobre la prevención de contagio, a la hora de tratarse de los niños, ya que cualquier persona puede pescar esta enfermedad, ya sean familiares, amigos del colegio o alguna persona con problemas en su organismo.
Los padres deben estar al tanto de cómo transcurre la enfermedad en el niño, debido a que pueden crearse otras enfermedades tales como neumonía, ataxia cerebelosa, entre otra más y ahí sí se convertiría en un grave problema.
Si tu bebé presenta algún resfriado durante la varicela y no sabes qué hacer, te invitamos a leer en nuestro blog sobre: Resfríos en bebés.
En caso de que el niño presente por varios días altos niveles de temperatura y su estado físico esté en malas condiciones, lo mejor que se puede hacer es acudir al médico.
Además la directora explica, que en caso de que el bebé padezca de esta enfermedad en los primeros días de vida, será un problema muy delicado para él, ya que la enfermedad puede acabar con la vida del bebé.
Normalmente a los hospitales, suelen llegar muchos casos de bebés con esta enfermedad y los mismos deben ser atendidos lo más pronto posible. Las mujeres embarazadas que lleguen a tener varicela unos días previos al parto, tienen la posibilidad de que el niño nazca con esta enfermedad o pueda que el parto se complique.
Sintomatología de la varicela en bebés
Los síntomas más usuales durante la varicela son, fuertes dolores de cabeza, comezón en la piel, náuseas, falta de hambre, altas temperaturas y vómitos, sin embargo, en caso de ver alguna irregularidad en el bebé, lo primero que deben hacer los padres es buscar ayuda de su pediatra.
La directora Aguirrezabalaga expresa, que las primeras partes del cuerpo en ser afectadas por la varicela, son la cabeza y la parte posterior de las orejas, pero luego se esparce por la caja torácica del bebé, para así extenderse a las demás partes del cuerpo. Además, a los dos días de haber salido la primera ampolla, es sencillo reconocer que se trata de la varicela.
La varicela proviene del virus del grupo de herpes de la Varicela-zóster, el cual puede contagiarse por medio de un estornudo o una tos, o si se utiliza algún objeto ya sea de uso personal, de igual forma se contagiará. Además, si la persona llegara a tener una herida y existe el contacto con alguien con varicela de igual forma estaría contagiado.
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El tiempo que puede aparecer la enfermedad es distinto en cada persona, pero normalmente suelen ser vista entre los 10 a 22 días. El periodo de alta probabilidad de contagio es, cuando las ampollas se explotan y sale su contenido. Después que ocurre esto, las ampollas pasan a ser ronchas a los 4 o 5 días.
Método para prevenir la varicela en bebés
En caso de que el pequeño tenga varicela, tendrá que ser atendido por medio de medicamentos tales como: jarabes para disminuir la fiebre, antialérgicos para aliviar la comezón en la piel y algún medicamento que sirva para las infecciones, debido a que la varicela no posee un tratamiento curativo en específico.
La ingesta de antialérgicos es de suma importancia, ya que en el momento que explotan las ampollas y se forman las ronchas, genera una comezón terrible en el niño y lo mejor es evitar que el niño se esté rascando la piel, debido que las ronchas quedarán marcadas en la piel para siempre.
No se debe vestir a los niños con ropas ajustadas, ya que esto ocasionará molestia en el bebé. Además la varicela solo ocurre una vez en la vida de la persona, debido a que el sistema inmunológico de la persona se hace más fuerte contra el virus, sin embargo, la misma tiene vacuna.
Consejos para los padres
Los padres suele hacer muchas preguntas en relación a la varicela, pero está es una de las más comunes; ¿En caso de que esté un niño con varicela, es bueno alejar al bebé que no presenta ningún síntoma?
La directora Belén Aguirrezabalaga explica que el tiempo para contagiarse de esta enfermedad es durante los primeros días, previo a la aparición del sarpullido en la piel y unos siete días después cuando el sarpullido está en su etapa de roncha, se considera contagioso.
Sin embargo, no se puede decir con exactitud en qué periodo de la varicela será el contagio, debido a que cada caso se evalúa de manera diferente, dependiendo del contacto que hayan tenido las personas.
Cabe destacar que esta enfermedad se puede evitar, con el uso de la vacuna. Además, existen entidades independientes donde realizan jornadas de vacunación en una fecha específica del año.
Finalmente, la directora de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria desmiente sobre el mito de bañar al niño en caso de tener varicela.
Sin embargo, explica que se puede hacer de manera delicada, sin durar mucho tiempo tomando la ducha y con el uso de un jabón neutro.
Asimismo, al finalizar la ducha para secar al bebé se debe dar pequeños toques con el paño en su piel, para así no ocasionar ningún daño.
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